El pasado 6 de enero, el Gobierno de México llegó a un acuerdo con el sindicato de Mexicana de Aviación para la compra de esta aerolínea por más de $800 millones de pesos.
Este suceso se venía arrastrando desde 2022, cuando el gobierno y los ex trabajadores de Mexicana de Aviación estuvieron en reuniones para la negociación. Inicialmente se plantearon alrededor de $600 millones de pesos hasta que se acordó la nueva cifra que supera los $800 millones.
Así, la compañía cederá varios activos, mismos que el Gobierno Federal podrá usar para operar su “nueva” aerolínea comercial, que, en palabras del presidente Andrés Manuel López Obrador, será para que los militares del país la usen.
Según Reuters, dicho acuerdo está conformado por los derechos de uso de la marca de la aerolínea y la compra de dos edificios, un centro de formación técnica y un simulador de vuelo. Así como MexicanaLink y MexicanaClick.
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Sin embargo, aún no se ha acordado un cronograma para el pago, mismo que se dividirá entre el sindicato de pilotos ASPA, el sindicato de asistentes de vuelo ASSA, el sindicato de ex trabajadores de aviación AJTEAM y el sindicato de trabajadores del transporte SNTTTASS proporcionalmente por un porcentaje de lo que se debía cuando Mexicana cerró. 
