La compañía fabricante de aeronaves, Boeing, acordó declararse culpable por el cargo de conspiración de fraude criminal, por lo que deberá pagar una multa de 243.6 millones de dólares por los accidentes ocurridos en 2018 y 2019 en Indonesia y Etiopía, respectivamente, y durante los cuales murieron 346 personas.
Este acuerdo de culpabilidad, calificaría a la compañía como “delincuente” y también responsable por las pérdidas humanas de esos vuelos, con lo cual podría no conseguir contratos gubernamentales con empresas como el Departamento de Defensa de Estados Unidos y la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA).
Y es que, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos expuso –a través de un proceso penal– que Boeing violó un acuerdo de 2021 relacionado con los accidentes. Sin embargo, al haberse declarado culpable, Boeing se ahorrará un juicio que lo expondría aún más al escrutinio de la opinión pública.
Cabe señalar que, como parte del acuerdo, la empresa acordó gastar 455 millones de dólares durante los próximos años para impulsar programas de seguridad y cumplimiento.
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Familiares de víctimas, inconformes con la decisión
De acuerdo con la agencia de noticias Reuters, la junta directiva de Boeing deberá reunirse con los familiares de las víctimas de los accidentes. Mientras tanto, los afectados están inconformes con la declaración de culpabilidad, pues consideran que las responsabilidades penales deberían haber sido mayores.
Anton Sahadi, uno de los familiares de las víctimas que perdieron la vida en el vuelo de Indonesia, expresó a través de un comunicado que el castigo para el fabricante de aeronaves debería incluir cargos penales contra quienes permitieron la venta de los aviones 737 MAX, modelos que presentaron fallas en el control de vuelo debido a su diseño.
“Si este accidente ocurre otra vez en el futuro, Boeing hará lo mismo, ofrecer una disculpa”, lamentó Sahadi.
Boeing: Tres accidentes en cinco años
En 2018, un primer accidente ocurrió cuando un avión Boeing 737 que transportaba 189 personas desde Yakarta, Indonesia, se desplomó sobre el Mar de Java.
Cuatro meses después, en febrero de 2019, otro 737 MAX, operado por Ethiopian Airlines, se dirigía hacia Addis Ababa, la capital etíope cuando casi inmediatamente después del despegue se desplomó, lo que ocasionó la muerte de 157 personas incluidos ocho miembros de la tripulación.
A principios de 2024, el 5 de enero, una aeronave de la aerolínea Alaska Airlines sufrió el desprendimiento de una de sus partes que se encontraba a un costado del fuselaje. Nuevamente, se trató de un incidente que ocurrió a bordo de una aeronave 737 MAX.
Sin ningún herido que lamentar, el avión que despegaba de Oregon y se dirigía hacia Ontario, California con 171 pasajeros y seis tripulantes a bordo, regresó de forma segura al aeropuerto internacional de Portland sin lesiones serias. Sin embargo, este accidente volvió a poner en la mira a la compañía estadounidense, por la calidad de sus aviones en cuanto a temas de seguridad.
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