A partir del 8 de enero el número de operaciones en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), se reducirá por lo que, además de disminuir la saturación en el Benito Juárez, se impulsará el uso del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) así como el de Toluca.
Así lo informó Carlos Velázquez Tiscareño, director del AICM, al señalar que a partir de la fecha antes mencionada las operaciones se reducirán de 52 a 43 por hora.
Este recorte –dijo– está contemplado en el último decreto que emitió la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) y beneficiará tanto al AIFA como a la terminal aérea de Toluca, quienes recibirán los excedentes del aeropuerto capitalino.
“Recordemos que la reducción debió haber iniciado en octubre, cuando inicia la temporada de invierno. El presidente me autorizó trasladarla hasta después de Reyes y que no incluyera vuelos internacionales”.
Operaciones disminuyeron en temporada decembrina
Con 920 operaciones diarias en el periodo conocido como Guadalupe-Reyes, el AICM acumuló –hasta el 3 de enero del presente año– un total de 14 mil 700 operaciones en sus instalaciones, lo que representa una disminución del 7.3 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Para el vicealmirante Velázquez Tiscareño, esta reducción operativa es consecuencia de las medidas implementadas por el Gobierno Federal, como el descongestionamiento del tráfico aéreo en vuelos de carga, así como la eliminación de vuelos en horarios ilegales.
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Se cumplió el plazo
Desde el mes de agosto, la AFAC emitió una resolución en la que se establecía que de manera temporal se reducirían las operaciones de despegue y aterrizaje en el Aeropuerto Benito Juárez al pasar de 53 a 42 vuelos por hora.
Ante los pronunciamientos en contra de esta medida por parte de organismos como la Asociación de Pilotos Aviadores (ASPA), la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y aerolíneas como Viva Aerobus, Volaris y Aeroméxico, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) determinó que la reducción de vuelos se aplazaría de octubre hasta el 8 de enero.
De acuerdo con un par de estudios realizados por la SICT, se rebasó en más de 25 ocasiones el número máximo de pasajeros que pueden ser atendidos en las dos terminales del aeropuerto Benito Juárez.
